CHINA SE ADELANTA A EEUU Y LANZA EL PRIMER PORTAVIONES VOLANTE DE LA HISTORIA
Se trata del el JIU TIAN, clave para la guerra del futuro.
La nueva nave, que puede vigilar y lanzar misiles por su cuenta, tiene una parte central modular desde la que desplegará enjambres de drones inteligentes coordinados en misiones de ataque
Éste es el Jiu Tian, el primer ‘portaviones volante’, una aeronave militar de enormes dimensiones que vuela sin piloto diseñada para afrontar las nuevas condiciones de la guerra moderna que se han establecido en la guerra de Ucrania. Una guerra de desgaste donde grandes números de drones y otras armas autónomas de bajo coste equipadas con inteligencia artificial serán cruciales para ganar cualquier conflicto con la fuerza de los números y la tecnología más rápida.
Presentado esta semana en la feria de aviación internacional Zhuhai Airshow, en la costa del sur de China, el Jiu Tian (‘cielo alto’ en español) está diseñado en torno a un módulo intercambiable situado en la parte central de su fuselaje. El módulo sirve para configurar su función rápidamente según el tipo de misión, pero China lo ha presentado como una plataforma aérea para el despliegue rápido de enjambres de drones autónomos.
Los drones pueden volar individualmente o coordinados por una inteligencia artificial centralizada como si fueran enjambres. La plataforma está pensada para abrumar las defensas enemigas y obtener la superioridad en cualquier escenario de la forma más rápida posible.
Dominio de zona
En apariencia, el portaviones realizará misiones que pueden combinar la recogida de información, la vigilancia constante de espacios —vital para la defensa de zona— y el ataque aéreo masivo. Además, el Jiu Tian tiene cuatro puntos de anclaje bajo cada ala para usar armamento adicional.
El Jiu Tian utiliza un motor a reacción montado sobre el fuselaje central. Tiene unas alas de gran tamaño y estabilizadores traseros verticales en forma de ‘H’, lo que sugiere un vuelo a baja velocidad con gran alcance. El morro del avión parece estar equipado con radar y un módulo de sensores ópticos, electrónicos e infrarrojos.
Pero lo fundamental es su capacidad para lanzar enjambres de drones más pequeños, algo que China ha estado investigando en los últimos años tanto por aire como por mar. Los expertos chinos y norteamericanos piensan que los enjambres de drones ofrecen una ventaja incontestable en el aire. Pueden cubrir áreas amplias, desorientar a las defensas enemigas y llevar a cabo misiones de todo tipo dependiendo de su configuración, todo con una eficiencia sin precedentes por un coste infinitamente menor que las fuerzas aéreas convencionales.
El problema es que estos drones tienen una capacidad de vuelo reducida. Este portaaviones suple esa falta de alcance. Volando sobre largas distancias o realizando vuelos sostenidos sobre regiones de forma continuada, el Jiu Tian ofrece un despliegue en zonas alejadas de las bases terrestres o navíos de guerra.
Aparte de realizar labores ofensivas, los drones lanzados por el Jiu Tian podrían llevar otras cargas útiles no destructivas, como sensores para el reconocimiento y sistemas de interferencia electrónica