ECONOMIAINTERES GENERALNACIONALES

CRISIS EN «CELULOSA ARGENTINA», EMPLEOS EN RIESGO Y FUTURO INCIERTO PARA LA INDUSTRIA PAPELERA

La empresa, en default financiero desde mayo, reportó pérdidas por $172.634 millones y un patrimonio neto negativo de $23.744 millones, lo que la coloca en situación de «quiebra técnica».

La histórica papelera Celulosa Argentina atraviesa la crisis más profunda de su historia, con plantas paralizadas y más de 500 trabajadores afectados directamente. La producción se detuvo en las plantas de Capitán Bermúdez (Santa Fe) y Zárate (Buenos Aires) por falta de capital de trabajo, mientras que en Corrientes la subsidiaria Forestadora Tapebicuá suspendió operaciones indefinidamente, afectando a 500 familias que dependen de la empresa. El impacto se extiende a proveedores, contratistas y comercios locales.

  Las ventas internas cayeron un 32% interanual, con una drástica reducción del 52% en el segundo semestre. Los ingresos ordinarios se desplomaron 44%, resultado de menores volúmenes de venta, precios deprimidos y un mercado interno debilitado.

   La crisis traspasa fronteras: su filial uruguaya Fanapel también enfrenta serios problemas de capital de trabajo. La empresa contrató a la consultora Valo Columbus para buscar nuevos socios o inversores que inyecten capital fresco. El directorio admitió que la continuidad operativa depende exclusivamente del éxito de esta reestructuración.

  Mientras tanto, los trabajadores enfrentan un futuro incierto, con la industria papelera nacional en jaque y miles de empleos directos e indirectos bajo amenaza inminente.